miércoles, 2 de octubre de 2019

Guanábana, el dulce espinoso



El trópico destaca por la increíble cantidad de frutas que puede ofrecer. El fuerte sol que se mantiene durante todo el año, las generosas lluvias y todos los climas que se presentan en cada piso térmico, le da a cada especie la oportunidad de desarrollarse y presentar formas únicas las cuales en muchas ocasiones se manifiestan en sus frutos.






Las frutas tropicales son bastante valoradas en el mercado extranjero, por lo que aquí mismo deben ser valoradas como el tesoro que son. Por eso su cultivo o la comercialización de productos derivados de estas frutas son una buena fuente de ingresos para fortalecer a la región económicamente.
Empezare hablando de la guanábana, (Annona Muricata). La palabra muricatus significa en latin áspero y con muchas puntas, lo cual es un precisa descripción para esta fruta. A pesar de que el árbol solo alcanza un pequeño tamaño de tres a ocho metros, produce una fruta bastante peculiar debido a su enorme tamaño y peso en comparación a otras frutas, su gran porcentaje de pulpa, más de cien semillas y una cascara caracterizada por sus espinas.

Esta planta prospera en climas cálidos y húmedos. Es una especie de crecimiento rápido.  Necesita bastante luz solar y suelos con buen drenaje para desarrollarse de forma saludable. Sus flores no producen néctar por lo que no son polinizadas por abejas, pero si por escarabajos y hormigas. Suele dar frutas dos veces al año, generalmente en épocas lluviosas. Al cultivarse debe tenerse cuidado con la humedad ya que de este factor depende que sea propensa a enfermedades. La calidad del fruto depende mucho de los cuidados que la planta reciba y el momento en que este se coseche.

Por lo general esta planta suele verse ocasionalmente en las fincas o en los campos, pero debido al aumento del aprovechamiento de esta fruta, empezó a formarse un mercado y a su vez a cultivarse con más frecuencia. Además de que la presencia de la guanábana puede complementarse con otros cultivos ya que puede utilizarse como cerca viva o para hacer sombra y refugio a hortalizas que lo necesiten. Respecto a su producción en el departamento de Santander esta se refleja en un área aproximada de 250 hectáreas.

La pulpa suave y blanca de la guanábana dentro de esa cascara espinosa, es una muestra visual del trato amable que esta fruta genera en nuestro cuerpo.

El fruto es utilizado en manjares como jugos, postres y helados, pero también es conocido por sus componentes saludables y sus propiedades medicinales. Ya que contiene vitamina C, hierro, magnesio y potasio. La guanábana al consumirse trae beneficios al sistema digestivo y también tiene propiedades antioxidantes y diuréticas y puede controlar enfermedades como la hipertensión.

Aunque una de sus más estudiadas propiedades para la salud, es su uso para combatir el cáncer, ya que la guanábana y las demás plantas de la familia annonaceas producen compuestos llamados acetogeninas, los cuales pueden neutralizar a las células cancerígenas y evitar que estas se desarrollen y se propaguen por todo el cuerpo. Por eso el uso de la guanábana como alimento anticancerígeno está ampliamente difundido.

Las hojas y la corteza pueden ser consumidas en té el cual tiene efecto relajante y descongestionante y las semillas pulverizadas pueden ser aprovechadas como repelente para insectos. Por esta misma propiedad las semillas no son recomendables para el consumo humano.

Dentro de la familia Annonacea también hay otra fruta similar a la guanábana, la cual es la chirimoya. Esta comparte similitudes en cuanto a la forma del fruto como también en sus propiedades nutricionales y medicinales. Por lo que su cultivo y consumo también es recomendado.

Para concluir queda decir que en estas tierras no solo tenemos esta deliciosa fruta, sino también un maravilloso alimento que al consumirlo puede mantener nuestra salud en otras óptimas condiciones y prevenir enfermedades, un valioso recurso natural que puede fortalecer una economía sostenible.

Dulce guanábana, blanca y suave.
De árbol pequeño y cascara áspera.
Pero de generosa pulpa y excelso en nutrientes.
Alegras mi paladar y me curas a mis adentros.

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